Bacterias intestinales ¿responsables de la obesidad infantil?

En el año 2016 la Secretaría de Salud hizo dos declaratorias trascendentales en la historia de México en cuanto al tema de salud pública federal: se emitió por primera vez un estado de emergencia sanitaria por diabetes y obesidad debido a la gravedad que estos padecimientos tienen en el país.

Destaca que esta es la primera vez en la historia de México que se lanza una alerta de emergencia sanitaria a causa de una enfermedad no infecciosa, de la cual la población infantil del país sobresale con una 33 por ciento de los individuos registrados.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la obesidad infantil tiene asociación con una amplia gama de complicaciones graves a la salud, además de que existe un creciente riesgo de contraer enfermedades de manera prematura como diabetes y cardiopatías. En cuanto a los países en desarrollo con economías emergentes, la prevalencia de sobrepeso y obesidad infantil entre los niños en edad preescolar llega a superar el 30 por ciento.

Ante esta información un equipo liderado por el doctor Adrián Ochoa Leyva, investigador titular del Instituto de Biotecnología (IBt) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), realiza estudios en el microbioma humano para entender cómo se relaciona que los microorganismos que habitan el intestino humano, específicamente de niños sanos y niños obesos, con complicaciones metabólicas.

“Buscamos ver qué microorganismos están activos en el intestino de los niños sanos y apagados en niños enfermos, y viceversa, con el objetivo de entender el papel de estos microorganismos en el desarrollo de la obesidad”, explicó.

Para identificar estos microorganismos se llevan a cabo tres métodos: metagenómica, que analiza el ácido desoxirribonucleico (ADN) de todos los microorganismos; metatranscriptómica, para analizar el ácido ribonucleico (ARN) de todos los organismos activos; y la virómica, que sirve para conocer aquellos virus implícitos en la modulación del microbioma activo durante la obesidad.

De acuerdo con el experto, la actividad de estos organismos depende mucho de la alimentación, ya que si esta es rica en grasas o hidratos de carbono se estimula a que los microorganismos con preferencia por este tipo de alimentos se sobreproduzcan y, a la vez, esta sobreproducción tiende a liberar moléculas que se asocian con patologías como la obesidad.

El siguiente paso de este trabajo es revertir la premisa de que si la obesidad inicia desde la niñez, es probable que se llegue a una edad adulta obeso, situación que representa un fuerte peso en el sistema de salud del país.

Fuente Agencia CONACyT

 

 

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