Política en Tacones: ¿Hasta cuándo?
Por Ángel Omar Barbosa
A dos meses de su desaparición las autoridades no han dado señales de inteligencia para dar con el paraderote los 43 normalistas desaparecidos. Su precaria investigación no ha dado los resultados deseados y lo que es peor, las sospechas de que sean encontrados sin vida siguen presentes. Evidentemente y con mucho fervor, los padres tiene la esperanza de que sigan con vida, incluso han asegurado que han sido llamados por teléfono por anónimos quienes aseguran que aún están vivos.
Esto no hace más que levantar más preguntas que respuestas. Y es que era de esperarse que las autoridades dejen de buscar en fosas clandestinas por dos razones, una menciona el hecho de que para dar un alud de esperanza no se buscará allí porque se da a la idea de que siguen vivos y no tiene caso seguir buscando por ese lado, la otra razón es muy evidente: encontrar más fosas da a entender que la inseguridad no está haciendo su papel y seguirán encontrando cadáveres que lo demuestren.
Muchos de nosotros ingenuamente llegamos a creer que con la captura del ex presidente municipal, Luis Abarca, la búsqueda se reduciría en tiempo y forma. Sin embargo, nos dimos cuenta de que no fue así. Las marchas y destrozos durante las mismas no dan cuanta más que de una cosa: el pueblo ya está cansado de tantas mentiras propinadas desde las esferas del poder y que ya no es tan fácil para las autoridades esconder un caso tan grave como este. Es cierto que la violencia nunca es justificada, pero muchos de nosotros sabíamos también que esto iba a pasar, y nos dimos cuenta de ello cuando la dictadura prefecta regresó a la silla presidencial. No estoy defendiendo un PAN quebrado desde dentro, con un ex presidente traidor y un chaparro que se refugia en Harvard, ni tampoco estoy instando a votar por el Peje, quien no entiende que la terquedad no es un aliado en la democracia. Mas quiero evidenciar que ninguno de los tres partidos políticos ha estado a la altura para resolver lo que a todas luces se nota que ellos mismos provocaron.
El pasado jueves (una semana después de la marcha y encuentro entre autoridades y ciudadanos en el zócalo capitalino) la XI Región Militar con sede en Torreón irrumpió en la Universidad Autónoma de Coahuila, en busca de alumnos y profesores que hayan participado en la marcha del 20 de noviembre. El video que circula en Youtube con el nombre de “Dónde quedo la Autonomía?” se muestra a los uniformados recorriendo las aulas de la facultad de ciencias políticas. Evidentemente los alumnos se escuchan molestos e irreverentes ante su presencia. ¿Qué sucedió? EPN busca chivos expiatorios por su mal manejo de la situación. Y claro, también de este lado se busca su destitución al cargo.
El país seguirá pidiendo justicia, seguirá marchando, seguirá causando destrozos, seguirá cantando consignas contra el gobierno y seguirá alzando la voz hasta que la verdad se haga presente. Después de dos meses de búsqueda y con un procurador que ya está cansado, me hace creer lo peor. Solo espero que la voz de los normalistas vivos me haga callar pensar lo contrario.